lunes, 9 de agosto de 2021

Ora et labora



Quizás la más conocida regla de la vida monástica. Redactada por San Benito de Nursia hacia el 540 en Montecassino, tras edificar un monasterio y fundar la Orden Benedictina.

Pasan los años y los Benedictinos empiezan a relajarse en el cumplimiento de la regla. Al parecer practicaban más el "ora" dejando el "labora" para los legos y conversos que convivían con ellos en los monasterios.

Debido a ello, Roberto de Molesmes fundó la Orden Cisterciense (Ordo Cisterciensis) como una reacción a la relajación que consideraban que tenía la Orden benedictina, queriendo volver al espíritu original de la Orden de San Benito. Así nació el Cister pero...

Pasan los años y los Cistercienses también empiezan a relajarse en el cumplimiento de la regla, una vida de oración y trabajo debía ser muy dura hasta para un monje vocacional. Y hete aquí que en el Cister se produce un cisma, originandose dos órdenes en lugar de un único Cister.

Estas dos órdenes se conocen como Orden Cisterciense de la común observancia y Orden cisterciense de la estricta observancia conocida también cono La Trapa.

La Orden Cisterciense de la Estricta Observancia (O.C.S.O. por su nombre oficial, en latín, Ordo Cisterciensis Strictioris Observantiae), conocida como Orden de la Trapa, es una orden monástica católica reformada, cuyos miembros son popularmente conocidos como trapenses. Tienen como regla la de San Benito, la cual aspiran seguir sin lenitivos. Nacieron en 1664 como una ramificación de la Orden benedictina del Císter