domingo, 18 de agosto de 2024


 

Gottfried vonHohenlohe, XIV Gran Maestre de la Orden Teutónica


Gottfried von Hohenlohe (1265-19 de noviembre de 1310) fue un noble alemán que sirvió como el 14º Gran Maestre de la Orden desde 1297 hasta su renuncia en 1303.

Hohenlohe nació de Kraft von Hohenlohe y Willeborg von Wertheim y procedía de la rica familia Casa de Hohenlohe.

Hohenlohe de Burg Hohlach, cerca de Uffenheim. También era pariente de un gran maestro anterior, Heinrich von Hohenlohe.

Hohenlohe se unió a la Orden Teutónica en 1279 y se convirtió en un Caballero en Franconía en 1290. En 1294 llegó a Gran Maestre de los Caballeros Teutónicos. (Deutschmeister), la posición del Maestro de la rama de la Orden, dentro de Alemania. 

Como asociado cercano del Gran Maestre Konrad von Feuchtwange, fue elegido como su sucesor por el Capítulo en República de Venecia, en 1297.

Hohenlohe fue considerado pasivo en cuanto a una mayor participación de la Orden Teutónica en Prusia  y Livonia, así como por  no haber escuchado las peticiones hechas por estas provincias. La orden estába reunida en Klaip-da-Memel solicitó la renuncia de Hohenlohe, que firmó en Elbing el 18 de octubre de 1303.

Hohenlohe dejó Prusia y se estableció en Alemania, donde recibió una bailía en Franconia. Instió restablecerse como gran Maestre, pero esta afirmación fue rechazada por sus Hermanos Caballeros, que habían seleccionado a Siegfried von Feuchtwangen. 

Hohenlohe residió en Ulm hasta que se trasladó a Mergentheim en 1307, donde murió. Fue enterrado en Marburg.

La imagen


 Armadura alemana del siglo XVI.

El rojo Pasión : Simbolismo


 El color rojo cuando entró en Europa, es decir ese rojo, bermellón, granate, etc... tiene muchas conjeturas y teorías de cuando llegó a Europa, nos quedamos con la más bonita, que es la de que las ordenes monastico-militares, aprendieron a utilizar los pigmentos de la sangre de vaca...recordemos que la vaca en las ciencias herméticas tiene un significado muy especial.
Pero el hecho de que el color tan característico de la ordenes, la primera la Templaria fuera únicamente del uso exclusivo de los freires se debió a un acta papal de Inocencio II porque al parecer habían confusiones con la cruz del hospital, y simbolizaba el Sacrificio y la Pasión de Cristo.

Sin embargo; según cita Campomanes es verdaderamente tajante con su sentencia. Dice algo como el color es de competencia exclusiva del Temple sin más discusión ni diálogo, es una bula papal.
Esto nos lleva a analizar algunos detalles de los que te hacen pensar y que son evidencias a la vista de matices donde colocan a la orden del Temple en esos momentos historicos, pero vista de forma natural., es aquí donde debemos aprender de la naturaleza, del hogar donde vivimos y que deberíamos escuchar más.

Esto es algo que se demuestra fácilmente, en la vida cuando los padres se van, los hijos heredan y como siempre sucede los hijos son imitaciones de la estructura de los padres.
Resumiendo de tal palo tal astilla. Fijaos en los detalles. 

Una orden hoy en día en vigor y que obviamente es la misma desde su creación, tiene desde el principio usa el color encarnado; es la Orden de Calatrava, esto es indiscutible.Por otro lado; tenemos la Orden de Santiago con exactamente el mismo color; pero la bula que dice que ese color es exclusivamente Templario, lo siguen llevando oficialmente estas dos ordenes españolas, así como la del Santo Sepulcro, el Temple, desgraciadamente, ya no esta operativo, a no ser que llamemos Templarios a las diferentes ordenes neo-Templararias, que existen en un amasijo de saco, que por desgracia no tienen absolutamente nada que ver con los Pobres Caballeros de Cristo...

 Algunos detalles sobre dos de los muchísimos significados interpretables por cada persona... la cruz de Calatrava es una cruz florlisada en las aspas, que también engloban su organización, el cerebro mismo de la Orden y la Orden de Santiago le añade la pica inferior, que le da un carácter eminentemente de Orden Militar armada, y así sucesivamente, como la del Sepulcro, aunque hoy en día de carácter puramente Hospitalario, como fue en sus comienzos,y aun usa el color rojo Pasión, siempre recordando que también tenían su brazo armado.

Por lo tanto, me dirijo, a los neo-Templarios. Nada es lo que parece, ni propiedad absoluta de nadie. Desde el primitivo Temple, pasando por las citadas, o los Caballeros de la Espada de Livonia, y muchas mas llevaron, y las supervivientes llevan este color tan simbólico.

Veamos:

El color rojo forma parte de la línea de los colores primarios y uno de los colores más llamativos y fáciles de percibir en el medio ambiente.

Bien es sabido, que el color no es algo propiamente de las cosas de nuestro alrededor sino que es el resultado de la percepción del ojo humano; es decir, podemos ver las cosas de color rojo, gracias a que el ojo capta determinadas longitudes de ondas de la luz que luego el cerebro dilucida como dicho color.

En algunos países es conocido como “colorado” y fue el primer color en recibir un nombre formalmente. De dicho color existen más de 100 tonalidades, todas muy diferentes entre sí.


Significado del color rojo

Este color rodeado de tanto simbolismo viene siendo el más visceral dentro de toda la gama de colores que el ojo humano puede reconocer.

El color rojo se encuentra vinculado tanto a connotaciones positivas como negativas, veamos algunas de estas:

Ahora bien, una de las asociaciones más importantes del color rojo son con la sangre y con el fuego. Este color está muy vinculado a la violencia, la guerra, la ira, la agresividad, de allí su relación con la sangre. Con respecto a la asociación con el fuego, podemos añadir el vínculo con el calor y el sol.

Por otro lado, tenemos la relación inseparable del color rojo con la pasión. Muchos psicólogos hacen la comparación de la pasión con la sangre ya que esta es roja; cuando estamos frente a cualquier exaltación o vergüenza nos ruborizamos (nos ponemos rojos debido al aumento de movimiento de los vasos sanguíneos).

En relación al amor, el rojo representa esa parte erótica de este sentimiento, representa seducción. De allí que la mayoría de los detalles de amor sean de color rojo; por ejemplo, es muy común ver que las personas regalen rosas rojas; que todo tenga incluido corazones de color rojo; que el día del amor y la amistad sea representado en su totalidad con dicho color; que una mujer se coloque un vestido de color rojo; entre otras cosas.

Entre otros de los significados del color tenemos su relación con la atracción, la vida, la fuerza, el vigor y la valentía.

También representa la energía, el deseo, el placer, el poder celestial y a las divinidades.

Entre unas de sus connotaciones positivas se encuentra su relación con la nobleza, la riqueza, la elegancia. Está muy asociado a la prosperidad, la vitalidad, el poder, al dinamismo, la buena salud, e incluso a la felicidad.

Asimismo resulta muy común relacionarlo con el atrevimiento y la espontaneidad, al punto de intervenir en el comportamiento y hacer que las personas sean un poco más extrovertidas.
Igualmente se vincula con el éxito, la independencia y la autonomía.

Entre otras de las connotaciones negativas tenemos el comportamiento violento, la falta de control, los excesos, la crueldad, la destrucción, el peligro y la muerte.

A modo de inferencia, estamos en presencia de uno de los colores que más diversidad de significados positivos y negativos tiene, pasando desde su relación con el amor hasta llegar a lo más oscuro como el peligro y la muerte.

Rojo: es «color de fuego y de sangre».​ En el cristianismo, es el color «del Espíritu Santo»,​ y «recuerda [...] la sangre vertida por y para Cristo».​ Se refiere a la virtud del amor de Dios. Es usado principalmente en las solemnidades de la Pasión del Señor como el Domingo de Ramos y el Viernes Santo.


La espada de Roland


Durandal (o Durandarte) fue la famosa espada de Roland, el caballero franco que murió en la batalla del paso de Roncevaux el 15 de agosto de 788 por ataque de los vascos.
Los relatos de esa batalla y el destino subsiguiente de la espada están plagados de historias míticas con poca o ninguna base histórica o arqueológica. Por ejemplo, el legendario héroe Bernardo del Carpio, según cuya leyenda fue él quien mató a Roland y tomó su espada.
Según la leyenda, fue enterrado con la espada en una cueva cerca del monasterio de Santa María la Real en Aguilar de Campoo. Carlos I lo habría tomado de allí cuando visitó la tumba en julio de 1522. Hoy esta espada se puede ver en la Armería Real de Madrid.
Hay muchas leyendas sobre la espada de Roland, incluyendo una que la coloca en el fondo del lago Carucedo en El Bierzo. Pero el más curioso de todos es el de la espada de Rocamadour.
Rocamadour es un pueblo ubicado en el suroeste de Francia, famoso desde la Edad Media por ser un importante centro de peregrinación, documentado desde 1172. Está el monasterio medieval de Nuestra Señora y la iglesia de San Miguel.
Y es allí, incrustada en la roca del precipicio sobre los edificios del santuario, que durante nueve siglos una espada fue sostenida por una cadena. No estaba completo, pero falta una pieza. Los propios monjes, que identifican esta espada con el famoso Durandal, afirman que fue el mismo Roland quien la incrustó allí, para que no cayera en manos de sus enemigos.
La conexión radica en el hecho de que fue precisamente de Rocamadour que Roland partió con sus tropas para cruzar los Pirineos, pero obviamente no pudo dejarlo allí porque murió en Roncevaux, a pocos cientos de kilómetros de distancia. Los monjes probablemente inventaron la historia como un medio de propaganda.
En cualquier caso, durante nueve siglos nadie se atrevió a discutirlo y permaneció la misteriosa espada, que no se sabe de dónde viene. En 2011 el ayuntamiento lo sacó del acantilado por primera vez y lo cedió al Museo Cluny de París para ser exhibido.

Carta de Jaime II y el Santo Cáliz de Valencia. Desmontando información.


 La historiadora Margarita Torres, coautora junto a José Miguel del ensayo Los reyes del Grial , donde afirman que la reliquia más buscada de la cristiandad es el cáliz de Doña Urraca, asegura que «el cáliz de Valencia es muy fácil de desmontar». Tan sencillo como que «el rey Jaime II, que tenía en su poder el cáliz de San Juan de la Peña, más tarde de Valencia, solicitó al sultán de Egipto a principios del siglo XIV que le envíe el cáliz de Cristo —como consta en el Archivo Corona de Aragón—». Lejos de desacreditar esta patraña Catalina Martín Lloris, doctora en Historia del Arte y profesora en la Universidad Católica de Valencia defiende la posibilidad de que llegara a la Corona de Aragón desde Egipto por esta petición de Jaime II, entre 1322 y 1327, resulta más plausible.
 

Esta carta unida a la desinformación de las dos profesoras desacredita la presencia del Santo Cáliz en San Juan de la peña en el siglo XI, para ello argumentan esta carta como prueba. Para una por eso no es el Santo Grial y para la otra tampoco. Para  la primera, porque si Jaime II pide el Santo Cáliz al sultán, está queriendo decir que desacredita el que había en San Juan de Peña. Para la investigadora  Valenciana “Lo del Grial es un cuento que nace en el siglo XII y nada tiene que ver con el Santo Cáliz”.

Además,  Margarita Torres afirma que existe una respuesta del sultán diciendo “no puedo mandar a Hispania lo que en Hispania ya está”. Ese documento no aparece. Tal vez sea una ensoñación de la señora de León.

En rigor no sabemos porque Jaime II hizo esta solicitud. Podría ser porque en San Juan de la Peña hubiese un Cáliz, pero el rey no creyese en su autenticidad. También podría ser que en el monasterio no se conservase ninguna pieza en ese momento y que llegase allí porque este monarca lo regalase a la abadía Pirenaica posteriormente.

La amalgama de confusión continúa gracias a tres señoras que están engañando a la opinión pública mundial gracias a documentales como el de Netflix. Una vez más caemos en el ridículo internacional. Tres si tres porque la tercera pata del trio de divas, también es para hacérselo mirar.

Así pues, intentaré explicarlo con sencillez para que se entienda:

1-No sabemos la motivación que impulso a Jaime II a pedir el Cáliz al sultán de Egipto. Pero podemos contextualizar la carta, esto no se si lo enseñan en la facultad, para dar una hipótesis.

   1.1- Jaime II intentó obtener una alianza con el sultán Khalil en 1292, pero al disminuir las amenazas exteriores, la dejó sin ratificar. Así, esta carta, sería un intento de acercamiento político.

    1.2- En 1312 este monarca persiguió a los templarios de la corona de Aragón pues habían sido dictaminados como herejes. La relación con los monjes de San Juan de la Peña con esta Orden de caballería era muy profunda. Por extensión el cáliz de san Juan de la peña había sido venerado y protegido por esta hermandad de monjes guerreros, por siglo.


Se puede hipotetizar, gracias a esta contextualización del documento,  que el monarca  quisiese desacreditar esta reliquia intentando conseguir otra similar, por eso la carta de 1322 y de paso unir lazos con el sultán de Egipto. Es evidente que el monarca no podía tratar como Santa la copa que había estado siendo venerada por lo herejes. El rey de Aragón no tenia en ese momento en cáliz, como dice Torres, lo tenían los monjes de la abadía fortificada de San Juan de la Peña.

 2- Hay tres evidencias que sitúan al santo cáliz en San Juan de la Peña desde al menos el siglo XI.

     2.1-Primera y más rotunda el capitel de la catedral de Jaca en el que podemos leer SIXTOII que está  haciendo referencia a la tradición Laurentina que ya en esas fechas existía. Esta afirmaba que el papa Sixto II entrego a San Lorenzo el cáliz que hasta entonces estuvo en Roma, y este lo mando proteger en su Huesca natal.

     2.2- El documento de donación de Ramiro II fechado en 1135 en el que solicita un “cáliz lapidium y un urceo similiter” a San Juan de la Peña. Evidentemente, no dice que es el cáliz de cristo porque en esos momentos es evidente, que el objeto se encuentra expuesto a cualquier incursión por parte de los almorávides. Muy probablemente al dejar de ejercer de ser rey y volver a la vida monástica ese objeto regresaría a la posesión de la abadía. Por eso ,cuando Martin el humano solicita el cáliz de cristo en 1344 dice expresamente “que mi antepasado os dono” no por Jaime II si no por su más lejano antepasado Ramiro II.

   2.3 El acróstico de Pedro I descubierto por Gabriel Songel en el que se puede leer “Caliz lapsis Exilis” la misma expresión que uso  Wolfran von Essembach en el siglo XIII para referirse al Santo Grial.


Evidentemente no quieren nunca hablar de Santo Grial y mucho menos de templarios. Otro documental está en camino,esperemos resultados.

Orden de Santa María de España



El Facsímil de la Cantiga 78 del Códice de Florencia donde se hace referencia a la Orden de Santa María de España, contiene basándose en la Orden de Calatrava, en 1270, Alfonso X el Sabio fundó esta Orden como una especie de Armada, pensada para la defensa naval de la Corona de Castilla.
Sus miembros se acogieron a la Orden del Císter, estableciendo su sede en Cartagena, y sus hábitos pasaron a ser una túnica negra y una capa roja con una estrella dorada, en cuyo interior se encontraban bordadas las armas de la Corona. 

Estaban bajo la advocación de la Virgen del Rosell, la preciosa talla medieval que se conserva hoy día en la Iglesia de Santa María de Gracia de Cartagena.
La armada de Santa María de España fue totalmente aniquilada en la batalla de Algeciras de 1278.
El día 23 de junio de 1280, las tropas de infantería, participaron en la batalla de Moclín junto a la Orden de Santiago. Cayeron derrotados, perdiendo la vida la mayoría de los soldados de ambas órdenes. Alfonso, que no quería que desaparecieran, tuvo que elegir cual de las dos salvar y eligió la de Santiago. Los miembros supervivientes de la Estrella pasaron a Santiago.
El Códice de Florencia, de las Cantigas de Santa María, contiene una cantiga dedicada a esta orden.

viernes, 19 de julio de 2024

Konrad von Feuchtwangen, XIII Gran Maestre de la Orden Teutónica

 


Konrad von Feuchtwangen (c. 1230 – Praga, 4 de julio de 1296), fue el Gran maestre de la Orden Teutónica (1291-1296).

Su carrera temprana es desconocida. En 1259 fue comendador de la orden en Austria. Sucesivamente ocupó los cargos de tesorero de la orden en Tierra Santa (fechas inciertas), comendador de Austria (después de 1271), maestre de Prusia y Livonia (1279), comendador de Franconia (1282), y maestre alemán (1284). No viajó a Tierra Santa durante la crisis ocasionada por el ataque mameluco a Acre en 1291, sino que permaneció en el Sacro Imperio romano germánico.

Poco después de la caída de Acre, Konrad fue elegido Gran maestre (probablemente en el otoño de 1291). La sede de la orden se trasladó a Venecia bajo su gestión. Konrad no mostró ninguna intención de reactivar las actividades de la orden en Tierra Santa: su principal preocupación eran los asuntos de la orden en Alemania, Prusia y Livonia. Konrad murió el 4 de julio de 1296 en Praga. Fue enterrado en la comandería bohemia de Drobowitz, pero sus huesos fueron posteriormente trasladados al convento cisterciense de Trebnitz en Silesia.

15 de julio, 925 Aniversario, Festividad de la Liberación de Jerusalén



En la Primera Cruzada en Tierra Santa:

El invicto comandante Cruzado Godofredo, Duque de Bouillon, Duque de Lorena y Marques de Amberes al frente de su Ejercito en una batalla que duro 8 días y sus 8 noches ininterrumpidas entró en Jerusalén el 15 de julio de 1099 y liberó la Ciudad Santa de la ocupación que perpetraron años antes los sarracenos.

En ese acto Godofredo fue aclamado y proclamado Rey fundador del Reino de Jerusalén y su primera medida fue rehusar al título de monarca por el de "Protector del Santo Sepulcro" negándose a ser coronado con corona de oro haciéndose coronar con corona de espinas en símbolo de humildad con su famosa frase inmortal: "No llevaré corona de oro donde Cristo la llevó de espinas" y fundar la Orden Militar de los Caballeros Custodios del Santo Sepulcro de la cual fue su primer comandante cuyo cometido principal es ser garantes a perpetuidad de que nadie se atreva a profanar jamás la Santa Basílica de la Tumba de Nuestro Señor Jesucristo.

" Hay hombres y hombres en el seno del Señor, pero solo Hombres de Honor son los que custodian el Imperio de Dios. Levanten sus armas Camaradas de la Cristiandad ante la Grandeza de quién permitió que nuestros pulmones en Jerusalén respirasen oxígeno puro. Empuñen y martilleen hasta caer rendidos exhaustos junto al atardecer entre cientos de los que jamás se han rendido "

Deus nobiscum, Vive Christus Rex !!

16 de julio, 812 Aniversario, Festividad de la Victoria de la Batalla decisiva de las Navas de Tolosa contra los invasores.

 


Deus Vult,  In Memoriam 16 de julio de 1212 - 16 de julio de 2024 Caídos por Dios y por Españá .

En el contexto de la Cruzada de liberación de Hispania el pasado 16 de julio conmemoramos la Victoria en la Batalla de las Navas de Tolosa.
Unos 30.000 cruzados hispanos bajo el mando de su Majestad el Rey Don Alfonso VIII de Castilla frente a más de 100.000 sarracenos invasores norteafricanos que nunca más volvieron a enfrentarse abiertamente a los cristianos en nuestra sacra Tierra Hispana. 
Tras la muerte de Su Majestad el Rey Don Alfonso VIII, su hijo el Rey Don Fernando III el Santo libertador de Andalucía Central y Occidental y su nieto el Rey Don Alfonso X el sabio, prácticamente erradicaron en sus tres reinados la invasión sarracena invasora de Hispania.
En oración infinita pedimos por la eterna gloria de esa Saga de Reyes venerados de Castilla que tanto bien hicieron por España, Don Alfonso VIII, San Fernando y Don Alfonso X, así como por todos los Cruzados que a través de los tiempos participaron en defensa de la invasión de España

Deus nobiscum,  Vive Christus Rex !!

Encuentran en la Iglesia del Santo Sepulcro el altar mayor de los cruzados


 En la iglesia del Santo Sepulcro de Jerusalén, un equipo de historiadores de la ÖAW encontró por casualidad el mayor altar medieval conocido, que se había dado por perdido durante décadas. Consagrado en 1149, el altar mayor de los cruzados, excepcionalmente ornamentado, apunta a una conexión hasta ahora desconocida entre Roma y el reino cristiano de Jerusalén.

 El 15 de julio de 1149 fue un día especial para Jerusalén: exactamente 50 años antes, los cruzados europeos habían conquistado la Ciudad Santa y proclamado el Reino de Jerusalén tras siglos de dominio musulmán. En ese importante aniversario un acto debía fortalecer aún más el joven reino. El punto culminante fue la nueva consagración de la Iglesia del Santo Sepulcro, uno de los mayores santuarios de la cristiandad. En el centro del edificio de la iglesia, espléndidamente ampliado en estilo románico en años anteriores, se inauguró una obra de arte especial: un nuevo altar mayor.

Entre los escombros de la historia

«Conocemos relatos de peregrinos de los siglos XVI, XVII y XVIII sobre un magnífico altar de mármol en Jerusalén», cuenta Ilya Berkovich, historiador del Instituto para el Estudio de la Monarquía de los Habsburgo y los Balcanes de la Academia de Ciencias de Austria (ÖAW) y coautor de un nuevo estudio sobre esta obra de arte histórica. Sin embargo, tan grande como fue la impresión que el altar dejó en las personas a lo largo de los siglos, así de repentina fue su desaparición de la memoria colectiva. «En 1808 hubo un gran incendio en la parte románica de la Iglesia del Santo Sepulcro», relata Berkovich. «Desde entonces, se pensó que el altar de los cruzados había desaparecido», añade el historiador.

Varios descubrimientos sorprendentes

Recientemente, el arqueólogo  Amit Re’em de la Autoridad de Antigüedades de Israel y el historiador de la ÖAW, Ilya Berkovich, hicieron un hallazgo sensacional en medio de la Iglesia del Santo Sepulcro: en un pasillo trasero de la iglesia, una pesada losa de piedra de varias toneladas había estado apoyada en la pared durante un tiempo indeterminado, y en su lado frontal los turistas habían dejado grafitis. Cuando la losa fue volteada debido a trabajos de construcción, reveló su herencia artística mucho más antigua: la losa, decorada con ornamentos de lazos en ese lado, fue rápidamente identificada como la antigua y espléndida fachada del altar medieval de los cruzados.

Para los historiadores, este descubrimiento es sorprendente en varios aspectos. Primero, por el hecho de que la losa pudo permanecer oculta durante tanto tiempo en un edificio tan intensamente investigado como la Iglesia del Santo Sepulcro, a pesar de recibir diariamente la vista de miles de peregrinos y turistas. «Que algo tan significativo pudiera pasar desapercibido en ese lugar durante tanto tiempo fue completamente inesperado para todos», confirma Berkovich.

Igualmente significativo es el nuevo conocimiento que el hallazgo permite sobre el altar mayor medieval. Las excepcionales decoraciones llevaron a los investigadores a la pista del llamado Cosmatesco. Esta técnica especial de decoración en mármol era dominada exclusivamente por maestros gremiales en la Roma papal, quienes transmitían esta habilidad de generación en generación. La técnica se caracterizaba por usar pequeñas cantidades de valioso mármol, que en la Roma medieval se obtenía principalmente de edificios antiguos, para decorar grandes superficies colocando pequeños fragmentos con gran precisión, creando patrones geométricos y ornamentos resplandecientes.

El altar respaldaba la reclamación de la Cristiandad

El valor de este arte era bien conocido por sus maestros y también por el Papa. Solo se conocen pocas obras de arte Cosmatesco fuera de Roma, y hasta ahora solo una fuera de Italia: en la Abadía de Westminster, donde el Papa había enviado a uno de sus maestros. El ahora redescubierto altar Cosmatesco en Jerusalén debió haber sido creado con la intervención del Papa, posiblemente Eugenio III: al enviar el Pontìfice a uno de los maestros Cosmatesco al Reino de Jerusalén para fabricar el altar de los cruzados, subrayó literalmente la reclamación de la cristiandad sobre la ciudad. «El Papa honró así a la iglesia más sagrada de la cristiandad», afirma Berkovich.

El redescubierto altar mayor es así la prueba de una conexión desconocida hasta ahora entre Roma y Jerusalén, que también es importante para la historia del arte europeo. «Con un ancho original de más de 3,5 metros, hemos descubierto el mayor altar medieval conocido hasta la fecha», destaca Berkovich. Él espera que futuras investigaciones en los archivos papales puedan sacar a la luz más detalles sobre la historia de la creación del altar, posiblemente incluso la identidad del maestro Cosmatesco que creó la obra de arte.

lunes, 5 de febrero de 2024

Burchard von Schwanden XII Gran Maestre de la Orden Teutónica


Burchard probablemente provenía de una familia noble que vivía en Schwanden, cerca de Schüpfen. Probablemente ingresó en la Orden Teutónica hacia 1269. Con otros cruzados se trasladó a Jerusalén (quizás ya en 1267). En 1275 fue comandante de Köniz y en 1277 ascendió al rango de comandante rural de las Órdenes Teutónicas de Turingia y Sajonia. En 1283 fue elegido Gran Maestre de la Orden Teutónica en Acre.

Durante su reinado la situación de los cristianos en Tierra Santa se volvió crítica. Los mamelucos conquistaron gradualmente numerosas ciudades y castillos cruzados, destruyeron el condado de Trípoli en 1289 y amenazaron el resto del reino de Jerusalén alrededor de su capital, Acre. Esta situación tuvo un grave impacto en la Orden, que todavía tenía su sede en Acre, pero Burchard no tenía prisa por ayudar a los cruzados en Ultramar porque estaba totalmente ocupado con los asuntos del estado teutónico de Prusia, Lituania y el Sacro Imperio Romano. .

En 1287, una invasión lituana destruyó gran parte de Livonia. Burchard partió hacia Roma en 1289, donde en presencia del Papa se trazaron las nuevas fronteras del estado de la Orden Teutónica en el Mar Báltico. Burchard también solicitó permiso al Papa Nicolás IV para coronar emperador a Rodolfo de Habsburgo. A principios de 1290, Burchard finalmente se vio obligado a ayudar a los cruzados en Acre, que estaban amenazados con un asedio por el sultán mameluco Qalawun. Dirigió un ejército reunido apresuradamente hacia Tierra Santa. Poco después de llegar a Acre, Burchard renunció inesperadamente a su cargo, dejó el mando de las tropas teutónicas a Heinrich von Bolanden, comandante de Sicilia, y abandonó Acre por razones desconocidas. Debido a la inesperada muerte del sultán Qalawun, el ataque mameluco se retrasó hasta el año siguiente. La ciudad cayó tras encarnizados combates en mayo de 1291 y finalmente se perdieron las últimas posesiones de la orden en Tierra Santa. El cronista Peter von Dusburg ya desconocía el motivo de su dimisión del cargo de Gran Maestre. Desde Acre, Burchard fue primero a Apulia. El 23 de agosto de 1291, el antiguo Gran Maestre fue nombrado en un documento del Arzobispo de Maguncia.

Los cronistas informan que se unió a la Orden de San Juan; según Nicolás de Jeroschin, se dice que pidió en vano ser readmitido en la Orden Teutónica antes de su muerte.

De 1296 a 1297 hay pruebas de que Burkhard von Schwanden fue comandante del Johanniterkommende Heimbach. De 1298 a 1308 (última mención documentada el 8 de mayo de 1308) fue comandante en Buchsee, pero también dirigió a otros Caballeros Hospitalarios. En enero de 1304, como comandante de Friburgo de Üechtland, aceptando una suma de dinero. En octubre del mismo año, como comandante de Hohenrain, vendió los bienes de este pueblo entrante. Se desempeñó como comandante de Klingnau en 1305. En febrero de 1308, como comandante conjunto de los Caballeros de la Venida de San Juan en Buchsee, Thunstetten y Reiden, representó a estas casas en procedimientos de arbitraje.

La Crónica de la Orden de Danzig informa que murió en Rodas y está enterrado allí.Una breve historia de los Grandes Maestres de la Orden Teutónica, escrita a finales de los siglos XV y XVI, también informa de la muerte en Rodas. Otros registros históricos de la Orden Teutónica sitúan la muerte o el entierro en Ackirs (Akkon) con los Caballeros de San Juan. El día de la muerte, el 27 de julio, está registrado en el anuario del monasterio de Fraubrunnen. En las notas tradicionales del monasterio de Einsiedeln, que sólo se conservan en una copia de Aegidius Tschudi y que probablemente fueron escritas a principios de la década de 1330, se describe al comandante Johanniter Burchard von Schwanden como un antiguo maestre de la orden teutónica y hermano del abad Johannes.  El año de su muerte, 1310, que se menciona a menudo en la literatura de investigación, se debe a la conquista de la ciudad de Rodas por los Hospitalarios en ese año.

Arte

 

 

María como Reina Celestial Coronada, 1798. Orden Teutónica.

El comienzo. La caballería Híspanica


Cuando se habla de las Caballerías y de las Cruzadas automáticamente se asocia con Francia. Todos los méritos en la formación de la Caballería, como aportación hispánica quedan silenciados, tal y como se refleja en la “Chanson de Roland”, en la que la gesta de los navarros al derrotar al invasor Carlomagno sería transformada por el galo en un ataque traicionero de los sarracenos a la retaguardia imperial. A esto también colabora el historiador Otto Brunner –adscrito al partido nacionalsocialista alemán-, que refiere la fundación de la Caballería francesa como artífice de la defensa contra el sarraceno innovada por Carlos Martel; todo con el único objetivo de despreciar la aportación hispánica.
La tradición ecuestre en la batalla proviene de los visigodos asentados en la península ibérica y fue exportada a Francia. Autores romanos hablan de los famosos jinetes ibéricos, que con su caballería ibérica ligera como el viento, ágil y valerosa fue durante años el terror de los pretores romanos: admiraban el valor de los “soldurios”. Aludían a la “Devotia Ibérica”, que era un principio de fidelidad a su señor y a un fervor “religioso” (en aquel tiempo a divinidades paganas)
Los reyes visigodos a fin de defender el trono por las continuas acometidas de la nobleza, se rodearon de guerreros llamados “Gardingos”, fundándose un vínculo personal de fidelidad recibiendo a cambio donaciones de tierras. Algunos de estos “Gardingos” habrían llegado a la Galia franca, conservando sus hábitos de guerrero luchando como jinetes, ante la extrañeza de los francos que preferían hacerlo a pie. De ahí proviene la influencia de la caballería hispana que fue imitada por los francos, si bien manipulando el origen.
Siguiendo el ejemplo del “gardingato”, los reyes de Asturias, de León y de Navarra se rodearon desde el siglo IX de “Fidelis Regis”, que les prestaban servicios tanto palatinos como bélicos y que les unía una relación de fidelidad. Incluso, en el año 974, el Conde Soberano de Castilla, García Fernández, a fin de potenciar la caballería castellana otorgó estatuto jurídico de Infanzones a los habitantes que le sirvieran como jinetes en la guerra, a cambio de privilegios y derechos igualados a los nobles.
Así se dignificó la milicia a caballo en Castilla al servicio del soberano a diferencia de Francia en la que los Caballeros no eran más que simples servidores de los Señores feudales.
Por otra parte, en Navarra, los caballeros se organizaron en Cofradías, bajo una advocación religiosa y ordenadas hacia el servicio de la defensa de la Cristiandad en la lucha contra el Islam. Los propios reyes se denominaban Caballeros y se igualaban con los demás miembros de las Cofradías, formando la Orden de Caballería.
Comenzaba a imponerse el servicio a una misión más grande, que iba más allá de la mera servidumbre al Noble. Se servía al Rey, por tanto, al bien común. Y ese bien común se fundaba en la defensa de la Cristiandad.
En el año 905, el rey Sancho Garcés I “El Grande”, nada más acceder al trono convocó a la juventud noble de su reino para que olvidaran sus rencillas internas y se unieran en el objetivo común de combatir al sarraceno como Caballeros en la defensa del reino.
El Papa Gregorio II ratificó la Orden de Caballeros de la Encina, cuyo origen se remontaba al año 722, cuando García Jiménez se preparaba para el combate contra el sarraceno y al elevar la vista al cielo para pedir el auxilio divino vio sobre una encina el símbolo de la Cruz; mandó a sus guerreros ponerse una cruz sobre sus pechos y lanzarse al combate iniciándose así la Reconquista de Navarra. El lema de la Orden era “Non timebo millia circundastes me”
En al año 1023, el rey navarro Sancho Garcés III “el Mayor” que se rige por la Norma de San Benito, instituye la Orden de Caballeros denominada de los Lirios, cuya enseña eran dos lirios celestes y en medio Nuestra Señora de la Encarnación, Patrona de la Orden, con el lema “ Deus primum christianum servet”; a fin de continuar la oposición contra el Islam se funda la Orden de caballeros de la Teraza, bajo la advocación de la Virgen de Nájera.
Así pues en los reinos hispánicos existía una gran diferencia entre un Caballero y un simple jinete armado, por lo que sería el ejemplo de la Caballería Hispánica el que fue llevado a Francia como modo de cristianizar y combatir al sarraceno.
Pero la ocasión de elevar a estos Caballeros a una misión sagrada se presentó con ocasión de la pedida de ayuda del rey aragonés Ramiro I para combatir a los mahometanos en Barbastro.
Acudió a la Santa Sede para solicitar el auxilio y reformar el sistema de concordato que existía de los demás reinos cristianos con los mahometanos en forma de tributos. Se consolida la idea de que los reyes cristianos deben luchar contra el Islam, no lucrarse con los impuestos. El Papa Alejandro II emite su Decreto “ Dispar Nimirum”, a fin de convocar a la lucha contra los sarracenos de Barbastro.
Y allí quedaron convocadas las tropas cristianas que, tras un asedio de cuarenta días, cayó en manos cristianas.
Este momento fue crucial para el concepto de las Cruzadas. Se puede definir como la Primera Cruzada: la hispana convocatoria de guerreros cristianos de varios reinos con el objetivo de la defensa suprema de la Cruz.
¿Qué le debe Europa a España? Aquí tenemos uno de los innumerables ejemplos: los Caballeros cristianos y la iniciativa de las Cruzadas. No olvidemos nuestra historia.
 

Arqueología


 Descubrimiento arqueológico en la isla de Gotland, Suecia: Calavera medieval encontrada revestida con cota de malla de la batalla de Visby de 1361

Ora et labora


Ora et labora (en español: reza y trabaja) es una locución latina que expresa la vocación y la vida monástica benedictina de alabanza a Dios junto con el trabajo manual diario.
De origen reciente (siglo XIX), la locución no se encuentra propiamente en la Regla de San Benito, sino que su esencia se encuentra, aunque con otras palabras, en la Lectio Divina (estudio meditativo de las Sagradas Escrituras).
Los tres pilares de la regla benedictina
Monasterio de Subiaco, Francia
Los capítulos 8 a 18 de la Regla de San Benito enseñan en detalle la forma de cantar el oficio divino (o Liturgia de las Horas).
El horario diario se establece teniendo en cuenta el verano y el invierno.
Además de la gloria de Dios (ora), el trabajo manual (labora) tiene un lugar importante. Y en el capítulo 48 leemos: «La ociosidad es enemiga del alma.

Los hermanos deberían participar en unos momentos concretos en el trabajo manual y en otros momentos concretos en la lectura de la palabra de Dios».
Esta dignidad dada al trabajo manual, que recibe el estado de Regla casi igual a la lectura de la palabra, es revolucionaria. En la época de San Benito el trabajo físico se consideraba degradante.
Se dejó para los siervos y las clases más bajas.
El mismo capítulo 48: «Son verdaderamente monjes si viven del trabajo de sus manos, como nuestros padres y de los apóstoles.»
También lo encontramos en la Lectio Divina (la lectura y meditación de la Escritura) que los monjes deben realizar en varios momentos concretos del día.
Además, San Benito determina que, al inicio de la Cuaresma, cada monje ha de recibir un libro de la biblioteca para su meditación y estudio de principio a fin (R. 48.16).
Las oraciones, generalmente salmos, que deben rezarse en cada uno de estos momentos se recogen el los Libros de Horas.
Algunos de ellos se han hecho muy famosos por sus iluminaciones como el de “Las muy ricas horas del Duque de Berry”.
La oración y el trabajo en la vida de los monjes, de acuerdo con San Benito, se deben acompañar de la lectura meditada de la Biblia: ora et labora no resumiría adecuadamente la espiritualidad benedictina.
El investigador francés Marie-Benoit D. Meeuws demostró que la expresión ora et labora tiene su origen en un libro sobre la vida benedictina escrito en el siglo XIX por Mauro Wolter, el primer abad de la nueva abadía de Beuronese (Alemania).
A pesar de lo anterior, lo cierto es que la locución ora et labora se encuentra habitualmente en la entrada de los monasterios benedictinos.
Se trata de una forma popular de expresar la espiritualidad monástica benedictina.


jueves, 11 de enero de 2024

Escudos de armas de los Grandes Maestres Teutónicos 1198-1566

 


Simbolismo en los Pirineos

 

Un símbolo apotropaico que se repite por igual en ambas laderas de los Pirineos, es el IHS evocando a Jesucristo. Lo original, es que por estas comarca la "S" se representa con una sinuosa serpiente, algo que parece un poco contradictorio para figurar como emblema del Cristo... En este caso, se encuentra sobre la clave del arco de acceso a una vieja casona, en su función de amuleto protector [Foto: Laruns (Francia)].

Fuente: Rafael Alarcon Herrera

Urraca I de León


 La primera reina que reinó por derecho propio en la península ibérica fue doña Urraca I de León . Se trata de un personaje absolutamente excepcional e insólito en el medioevo hispánico: por su condición de mujer, por su importancia e influencia en los hechos de la época en la que vivió y las divergencias que provocó, maltratada físicamente y psicológicamente por su segundo esposo y también por sus súbditos, demostró tenacidad y fuerza indomable, pero no ha sido apreciada justamente por la historia .Doña Urraca era bisnieta de un rey de Navarra, un rey de Aragón, una condesa de Castilla y un rey de Francia, un linaje excepcional, hija de Alfonso VI, que dicho sea de paso tuvo cinco esposas legales Inés de Aquitania, Constanza de Borgoña, Isabel de Francia, Berta de Toscana y Beatriz Urraca “La Temeraria”, apodo con el que pasó a la posteridad, tenia ciertas características tendientes a la violencia e incluso le reconocen “méritos” virtuosos en un hombre, pero impropios en una mujer, por lo que Doña Urraca es una figura histórica muy controvertida, poseedora de gran habilidad, carácter y determinación, su personalidad y las circunstancias históricas Era doña Urraca hija primogénita de Alfonso VI de Castilla y de Constanza de Borgoña, nació en León en el año 1081. Contrajo matrimonio con apenas doce años con el conde Raimundo de Borgoña, de quien nacería el futuro Alfonso VII en 1105 y su hija Sancha Raimúndez. Urraca se convierte en la única heredera a los tronos de León y de Castilla tras la muerte de su hermano Sancho en la batalla de Uclés en 1108. Alfonso VI en Toledo convoca una Curia para proclamar a Urraca sucesora y jurar en el Alcázar de Toledo como futura Reina de Castilla y de León .Al quedar viuda, su padre quiso casarla con Alfonso el Batallador, intentando evitar disputas ente leoneses y castellanos Las capitulaciones preveían que todos los reinos del matrimonio pasarían al heredero común, lo que excluía de la sucesión de León y de Castilla a Alfonso Raimúndez, hijo de Urraca, que era conde de Galicia Urraca murió durante el parto de un tercer hijo del conde Pedro González de Lara, con 45 años de edad en el castillo de Saldaña en Palencia, el 8 de marzo de 1126 y por deseo suyo fue enterrada en el panteón real de San Isidro en León, como era tradición de los reyes de León, tradición rota por su padre, Alfonso VI de León, quien recibió sepultura junto a la mayoría de sus esposas, entre ellas Constanza de Borgoña, madre de la reina Urraca, en el Monasterio de San Benito de Sahagún. Le sucedió en el trono castellano-leonés su hijo primogénito, que reinaría como Alfonso VIII. Trató durante su vida de hacerse respetar por sus súbditos y cuando se sentía agraviada gritaba: “¡El rey soy yo!”. Se autotituló: Totius Hispaniae Regina, emulamdo el titulo imperial que ostentó Alfonso hasta la anulación matrimonial: Alfonsus Gratia Dei Imperator de Leone et Totius Hispaniae Rex, de haber prosperado esta unión dinástica la unificación de los reinos cristianos de España y Portugal se hubiese materializado

Hartmann von Heldrungen XI Gran Maestre de la Orten Teutónica


Hartmann, hijo de Hartmann von Heldrungen (1203-1225), fue caballero de Heldrungen y, como su padre, vasallo del Landgrave de Turingia. Se unió a la Orden Teutónica el 18 de noviembre de 1234, junto con el Landgrave y más tarde Gran Maestre Konrad de Turingia (cuñado de Isabel de Turingia, canonizada en 1235), el posterior Landmeister y maestro alemán Dietrich von Grüningen, y su hermano Hermann von Heldrungen[1] y otros seis caballeros. El motivo probablemente fue la penitencia que se les impuso por la destrucción total de la ciudad de Fritzlar y la profanación de la colegiata allí dos años antes.


Hartmann participó en las negociaciones y celebraciones cuando la Orden de los Hermanos de la Espada se incorporó a la Orden Teutónica en 1237. En 1238 se convirtió en comandante de la Orden Teutónica en Sajonia. Contaba con la confianza del Gran Maestre y por ello ascendió rápidamente dentro de la orden. Entre 1261 y 1266 fue Gran Comendador y segundo hombre de la orden después del Gran Maestre Anno von Sangerhausen.

En el verano de 1273 Hartmann fue elegido Gran Maestre. Su mandato estuvo marcado por una relativa paz para la Orden y apoyó el cultivo de Prusia y Lituania. Logró ganancias territoriales en el Imperio y en Pomerania

El Temple XVIII

 


Los Caballeros Templarios fueron una orden religiosa y militar católica que se estableció en el siglo XII. Su propósito original era proteger las vidas de los cristianos que peregrinaban a Jerusalén tras su conquista. La orden creció rápidamente en tamaño y poder, y sus miembros se encontraban entre las unidades mejor entrenadas que participaron en las cruzadas.  Tenían como distintivo un manto blanco con una cruz ancorada roja sobre él.

En cuanto a la humildad, la regla de los Caballeros Templarios se basaba en la humildad y la modestia. Los miembros de la orden debían ser humildes y no debían buscar la gloria personal. El lema de la orden era “Non nobis, Domine, non nobis. Sed Nomini Tuo Da Gloriam” (“No a nosotros, Señor, no a nosotros. Sino a tu nombre sea dada la gloria”)

La regla de los Caballeros Templarios se basaba en la humildad y la modestia. Además de la humildad, los Caballeros Templarios se regían por una serie de valores que incluían la fe, la esperanza, la caridad, la justicia, la prudencia, la fortaleza y la templanza, las llamadas 7 virtudes. Estos valores eran considerados fundamentales para la orden y se esperaba que los miembros los siguieran en todo momento.

En cuanto a su comportamiento, los caballeros templarios eran conocidos por su disciplina y su dedicación a la orden. Los miembros de la orden debían seguir una estricta regla de conducta que incluía la abstinencia de ciertos alimentos y bebidas, así como la observancia de una dieta vegetariana en ciertos días . Además, los caballeros eran conocidos por su habilidad en la batalla y su valentía. La orden creció rápidamente en tamaño y poder, y sus miembros se encontraban entre las unidades mejor entrenadas que participaron en las cruzadas.

Vestían túnicas y capas externas de color blanco, mientras que la cruz patada roja debía estar visible sobre sus mantos.

Aunque no hay muchos detalles específicos sobre cómo practicaban la humildad, la regla de la orden establecía que los miembros debían ser modestos y no buscar la gloria personal. Además, la regla también establecía que los miembros debían ser caritativos y ayudar a los necesitados y exquisitos en el trato al prójimo.

En cuanto a la propiedad personal, los caballeros templarios podían poseer bienes personales, móviles o fijos, a diferencia de otras órdenes militares, pero siempre bajo supervisión y aceptación del Gran Maestre.

 
Los Caballeros Templarios contaban con una equipación completa para la batalla. La armadura del caballero templario era una de las más avanzadas de su época. Los caballeros templarios vestían túnicas y capas externas de color blanco, mientras que la cruz patada roja debía estar visible sobre sus mantos. En las batallas, usaban una armadura completa de metal de color blanco, con una capa blanca donde estaba bordada la cruz patada.

La armadura del caballero templario incluía una cota de malla, que era una pieza muy importante dentro de la armadura del caballero templario. Si el caballero quería tener una protección ligera, la cota de malla era la defensa perfecta, pero si necesitaba de un blindaje más reforzado, además de utilizar una armadura completa de acero, el caballero también utilizaba la cota de malla.

El casco del caballero templario era un casco de barril o “casco de cruzado” que cubría completamente la cabeza y solo tenía aberturas muy pequeñas para los ojos y la boca. Los diseños posteriores obtuvieron una forma curva principalmente en la parte superior, esto permitía desviar o disminuir el impacto de los golpes. El casco de cruzado ofrecía una mayor protección que los cascos anteriores, como el casco nasal y el spangenhelm; sin embargo, limitaba en cierta medida la visión y proporcionaba poca ventilación